El contacto físico es esencial en el desarrollo humano. Está
demostrado que el contacto físico y las caricias son de vital
importancia desde el nacimiento, de ahí tanta insistencia últimamente en
la importancia del contacto piel con piel del recién nacido y la madre
después del parto.
Un estudio realizado en los años 80 en varios
orfanatos de todo el mundo nos refleja claramente la gran importancia de
las caricias para el desarrollo y el crecimiento del ser humano. En
estos escenarios donde según la inversión social y la política llevada
por parte de cada país, se atendía de un modo correcto o menos correcto a
los niños allí recogidos.
Se vio que los bebés que no recibían mucha atención en los orfanatos,
simplemente dejaban de llorar porque habían deducido que sus lamentos
no servían de nada y se resignaban a su suerte. Los niños que crecían
sin demasiado contacto físico, sin caricias, besos, abrazos y el apoyo
de una familia, tenían muchas más probabilidades en la edad adulta de
sufrir algún tipo de enfermedad mental, e incluso de delinquir.
La afectividad demostrada a través de las caricias y el cariño es tan
importante por tanto para la crianza de un hijo y su desarrollo físico,
mental y emocional como el propio alimento.
Recuerda que para el ser humano es tan importante la alimentación como
el amor. Es el amor el que nos hace sentirnos seguros y respetados, con
fuerzas para enfrentarnos al mundo y a los problemas cotidianos y es el
amor el que nos hace sentirnos felices y con ganas de vivir cada día. Si amas a los tuyos no dejes de besarlos, abrazarlos y acariciarlos cada día con una sonrisa!