Es hora de irse a la cama ahora, y antes del beso de buenas noches, ¡nada es más hermoso que el ritual de leer cuentos con los niños!
La lectura tiene el poder de llevar a los lectores jóvenes a un mundo de fantasía, en el que pueden usar toda su imaginación y creatividad. Aquí, en la comunión de la lectura, junto a la luna, pijamas y mantas, el aire se llena de ternura, alegría y simpatía. Incorporar esta rutina no solo nos ayuda a desarrollar buenos hábitos y compartir tiempo juntos, sino que también tiene muchos otros beneficios:
- Investigaciones recientes han asegurado que, además de fortalecer el vínculo entre padres e hijos, el tiempo de lectura antes de los descansos nocturnos también puede promover el desarrollo cerebral de los niños, relajarlos y ayudarlos a aumentar la memoria.
- Tomarse un tiempo para leer tranquila y fácilmente puede ayudar al cuerpo a prepararse para dormir y descansar, quedarse dormido más rápido y disfrutar de una mejor calidad de descanso durante la noche, lo que significa más reservas de energía y un mejor estado de ánimo al día siguiente.
- Escuchar la voz de la madre o del padre de forma suave y monótona, y sentir su seguridad y comodidad a su alrededor antes de irse a la cama, esto traerá una gran sensación de seguridad al niño y hará que su sueño sea más cómodo. Es importante tratar estos momentos de lectura como oportunidades para que pasen tiempo juntos, no como una obligación. Lo ideal es que no haya televisores encendidos y tampoco celulares sonando, ya que el momento del sueño está próximo y el cuerpo y la mente preparados para el descanso.
- La vida de un niño que duerme con la imaginación llena de maravillosas historias es verdaderamente mágica. Estos cuentos llenan sus pensamientos de increíbles aventuras que luego revivirán al caer rendidos en un sueño profundo.
- Esta rutina puede convertirse en una dinámica entre padres e hijos y, con el tiempo, se transformará en un recuerdo especial de la infancia