La asertividad es la habilidad de comunicarnos y relacionarnos desde el respeto a uno mismo y a los demás. Es una habilidad social básica ya que nos permite defendernos y expresarnos sin atacar, ni dañar a los demás.
Cómo fomentar el desarrollo de la asertividad en niños:
- El primer paso es educar con nuestro ejemplo, los niños aprenden más de lo que ven que de lo que les decimos. Debemos actuar con asertividad y respetar a los demás pero también respetarnos a nosotros mismos. Por ejemplo: cuando discutamos con alguien o con el propio niño debemos tratar a los demás con respeto, y al mismo tiempo no permitir faltas de respeto.
- Dale espacio para que exprese sus opiniones, deseos e intereses. A menudo comenzamos desde casa censurando determinadas opiniones o deseos, debemos darles espacio para ser ellos mismos, siempre que lo hagan con respeto.
- Condena cualquier falta de respeto y enséñale a condenarlas.
- Dale herramientas para que se exprese desde el respeto. A veces, puede ser complicado expresar algunas emociones como el enfado o la tristeza, en esos casos debemos aceptar la emoción, ayudarles a reconocerla y entenderla y enseñarles modos de expresión adecuado.
- Acepta sus «no» y enséñale que no es malo decir que no que no necesita agradar a los demás o hacer todo lo que hacen los demás.