Lo primordial en la educación de los
hijos son las palabras que les decimos. A veces nos dejamos llevar por
las emociones, lo cual nos hace decir cosas negativas que en realidad
no aportan nada al desarrollo del niño.
Os proponemos
sustituir algunas expresiones negativas por otras más positivas.
Intentadlo y veréis cómo cambia la situación de acuerdo a las palabras que
usas.
En lugar de decir... / Decid....
“¡No grites!“ / “Habla en voz más baja”
”¡No comas rápido!“/“Mastica bien la comida“
“Otra vez hiciste un desastre...”/ ”Limpia tu cuarto, por favor”
”¿Cuánto tiempo tengo que esperarte?“/ “Es hora de irnos, despídete”
”¿A dónde crees que vas?“ / “Aléjate de ahí / Bájate, por favor“
“¡Te vas a caer!” / ”¡Ten cuidado!“
“¡Vas a llorar!“ / “Piensa en las consecuencias”
”¡Te vas a resbalar!”/ ”Ten cuidado dónde pisas“
“¡Te vas a mojar!”/ ”Usa el paráguas“ / “Ponte las botas de goma”
”¡No corras!“/ “Camina más despacio“
”¡No te apresures!“ / ”Tendrás tiempo suficiente”
“¡Te estoy hablando!”/“Escúchame, por favor”
”¡Termínalo ya!“/ ”Es hora de que termines esto, se acabó el tiempo“
”¿Cuántas veces tengo que decirtelo?“ / ”Haz lo que te estoy pidiendo, por favor“
“¡Ya no sé ni cómo hablarte!”/ “Busquemos una solución que nos guste a ambos”
“¡No hables así!“ / “Piensa en lo que hiciste”
”¡No sé!“/ “Inténtalo, si no lo intentas, no lo sabrás” o “Vamos a pensar juntos“
”¡No te entiendo!” / ”¿Qué es lo que quieres decir?“
“¡Te dije que no!“ / ”Ya dije mi opinión y no va a cambiar“
“¡Nada de dulces!”/ “Los dulces sólo se comen de postre”
“¡Te dije que no!“ / ”Ya dije mi opinión y no va a cambiar“
“¡Nada de dulces!”/ “Los dulces sólo se comen de postre”